A solo una semana del inicio de Boise Pride, los organizadores del festival enfrentaron un desafío financiero para iluminar el edificio del Capitolio. Normalmente, costaría alrededor de $5,000, pero este año, debido a la necesidad de instalar luces al otro lado de la calle en lugar de frente a las escaleras del Capitolio, el costo aumentó a alrededor de $15,000.
La comunidad y el nuevo patrocinador, Lime, se unieron para llenar el vacío de financiamiento y asegurar que el Capitolio se ilumine en apoyo a la comunidad queer de Boise e Idaho durante los días 8 y 9 de septiembre.
La necesidad de apoyo financiero surgió debido al cambio en la ubicación de las luces para iluminar el Capitolio desde el otro lado de la calle, lo que requirió equipos más grandes y costosos.
A pesar de la política de 2018 del Departamento de Administración, que había rechazado múltiples solicitudes para iluminar el edificio, esta excepción se hizo posible gracias al compromiso de la comunidad y el apoyo del patrocinador Lime.
Aunque la situación no era ideal, los organizadores de Boise Pride están agradecidos por el apoyo y pueden enfocarse en el festival que se llevará a cabo del 8 al 10 de septiembre.
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