Se reportan retrasos en vuelos en todo el país debido a la escasez de personal en los aeropuertos debido al control del tráfico aéreo y la TSA, durante el cierre gubernamental. En el Aeropuerto de Boise, el jueves por la mañana, los viajeros dijeron sentirse seguros, pero algunos temían los retrasos causados por el cierre.
A pesar de que el cierre entra en su segunda semana, el Aeropuerto de Boise parecía operar con normalidad el jueves por la mañana, con la mayoría de los vuelos según lo previsto. Sin embargo, las principales instalaciones de control de tráfico aéreo, incluidas las cercanas a Washington D. C. y Denver, experimentan escasez de personal. Se reportan problemas similares en Newark, Orlando, Nuevo México y California. Ni los empleados de control de tráfico aéreo ni los de la TSA están recibiendo sus salarios, lo que genera preocupación por posibles retrasos.
“Me siento tan segura como siempre”, dijo Renee Heald, “sólo me preocupa que mis vuelos no lleguen a tiempo”.
El viajero Bill Wiebe compartió su sorpresa por la normalidad en las operaciones del aeropuerto, pero seguía preocupado por el personal de la TSA. “Este es el primer viaje que hago desde que cerró”, dijo Wiebe. “Estaba un poco más preocupado por lo que iba a encontrar al llegar; hasta ahora no ha sido tan malo, pero aún no he pasado por la TSA. Espero que tengan suficientes empleados”.
Si bien los pasajeros del aeropuerto de Boise informaron un impacto mínimo por el cierre, los expertos advierten que las demoras en los principales aeropuertos podrían agravarse y causar problemas en todo el país.
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